El proyecto del Centro Comercial Imaginalia se acerca a las dos décadas de existencia con la misma firmeza y solidez de su concepción, una obra que desafía los prejuicios que hay frente a las soluciones arquitectónicas ligeras.
Es para muchos sorprendente saber que las soluciones textiles en la arquitectura marcan sus inicios a mediados del siglo XX. Las técnicas y materiales que componen las estructuras tensadas aparecen por primera vez en 1952 y encuentran su primer gran exponente en 1967, con la construcción del Pabellón Alemán para la Expo de Montreal, obra proyectada por Frei Otto y Rolf Gutbrod. Desde entonces, la investigación y los avances en la tecnología han dado paso a materiales más resistentes, más flexibles y con mayor control de la luz, como son el Poliéster-PVC o el ETFE.
Pero, ¿qué diferencia a la arquitectura textil de los materiales de construcción tradicionales? Principalmente 3 características:
Estas ventajas que ofrecen respecto a otros materiales tradicionales como
el vidrio o el metal, han propiciado que se popularice su uso sustancialmente
en la cobertura de grandes áreas y es común encontrar arquitectura textil en
estadios, aeropuertos, recintos feriales, entre otros.
Desmentir los prejuicios, un reto constante
Sin embargo, si estas innovadoras soluciones ofrecen tantas ventajas, ¿por
qué no están más extendidas en el mundo de la construcción?
Lo cierto es que el sector de la arquitectura textil aún lucha contra
prejuicios muy arraigados en el imaginario colectivo. La percepción es que sus
grandes ventajas, como la ligereza o translucidez o la transparencia (en el
caso del ETFE) , traen consigo grandes desventajas, como una rápida
deterioración, una baja resistencia a los fenómenos climáticos o una vida útil
corta.
Si bien aún no es posible comparar la resistencia de una membrana textil con una lámina de metal, la resistencia de estos materiales es sorprendentemente alta y pueden alcanzar un ciclo de vida de 20 o 30 años en perfectas condiciones si se hace el mantenimiento adecuado. La gran diferencia con otros materiales es que conceptualmente se diseñan para estar siempre en tracción y por eso se llaman “estructuras tensadas”. Se trata de materiales técnicos altamente desarrollados que pueden suplir muchas de las necesidades del diseño arquitectónico contemporáneo y en muchos casos se adaptan mejor a las nuevas corrientes de sostenibilidad y economía circular.
Centro Comercial Imaginalia, estandarte de la arquitectura textil
Uno de los ejemplos más llamativos que encontramos en territorio nacional
es una obra erigida en 2005 en Albacete. El Centro Comercial Imaginalia cuenta
con una cubierta textil diseñada por L35 Arquitectos que incorpora
membranas de PVC blanco y ETFE transparente.
La cubierta está en perfecto estado a pocos meses de cumplir 2 décadas y
desafía las concepciones de endeblez que erróneamente se le atribuyen al
sistema. No solo por los años que lleva protegiendo el recinto abierto del
centro comercial, también por las situaciones atípicas que ha superado durante
estos años.
En enero de 2021, la borrasca Filomena se adentró en la península ibérica
causando destrozos a su paso y dejando varias poblaciones sin suministro
eléctrico. Miguel Muñoz, gerente del centro comercial, temió lo peor: “Filomena
estaba arrasando con todo y los bomberos nos aconsejaron cerrar el centro comercial
por riesgo de desmoronamiento, y así lo hicimos”.
Sin embargo, al regresar al complejo días más tarde, se llevó una grata
sorpresa. “Esperábamos encontrar la cubierta derruida, pero, al volver, vimos
que todo estaba en perfecto estado”. La cubierta había sobrevivido a la
borrasca ¡y lo había hecho sin ningún rasguño!
Luz natural de día, juego de colores por la noche
Pero su resistencia no es su única fortaleza. El desempeño de las membranas
textiles con la luz es otra de las grandes ventajas del sistema y está bien
aprovechada en Imaginalia. La combinación de PVC y ETFE genera una cubierta
versátil que de adapta a las diferentes franjas horarias. El ETFE transparente
permite una sensación de amplitud y la entrada de luz natural por el día, mientras
que por la noche el PVC blanco funciona como pantalla para las coloridas
proyecciones que alegran la vista a los visitantes.
¡La mezcla realza el atractivo del recinto sin importar el momento del día!
Así, la arquitectura textil cumple más de 70 años como una solución innovadora y vanguardista que busca con hacerse un hueco entre el monopolio de los materiales tradicionales. Tenemos la completa seguridad que Albacete aún tiene mucho tiempo para disfrutar de Imaginalia y su magnífica cubierta textil, que dará protección durante muchos años más.
