Este proyecto se inscribe en el marco del macroproyecto del Grand Paris Express, consistente en la creación de nuevas líneas del metro de París y en la prolongación de otras ya existentes. Más concretamente, el proyecto corresponde a la creación de la nueva estación Rosny Bois Perrier en el prolongamiento de la línea 11 del metro parisino.

La cubierta de la nueva estación incorpora dos pozos de luz formados por cojines ETFE de 3 capas para aportar luminosidad asegurando al mismo tiempo la estanqueidad de la cubierta. El primer pozo, de forma trapezoidal, se compone de 7 cojines dipuestos sobre arcos y que cubren una superficie de 10,9m de ancho por una longitud variable entre 13,8m y 16,5m. El segundo pozo, de forma rectangular, se compone de 6 cojines también dispuestos sobre arcos y que cubren una superficie de 10,9m de ancho por 11m de longitud.

Esta configuración cubre un espacio total entre los dos pozos de 280 m².